Perfiles Juveniles

Promesas juveniles: Ignacio Pipistrelli

Promesas juveniles: Ignacio Pipistrelli
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En el último tiempo se ha consolidado en el plantel de primera más de un jugador de la cantera, es por esto que inauguramos esta nueva sección en donde vamos a conocer a las jóvenes promesas de Godoy Cruz. En este caso, hablamos con Ignacio Pipistrelli, delantero categoría 1997 que está realizando su primera pretemporada con el plantel de reserva.

Pipi, como lo conocen, fue uno de los goleadores y es uno de los jugadores que más se destaca en su categoría; además, disputó dos encuentros como titular en el Tombita (primera local). Sus logros en su corta carrera en este deporte han sido: Campeón del torneo Uno Medios, del canal 7, con Aldo Bolado, 2 veces campeón de la Liga Mendocina con su categoría, Campeón del Nacional con la Selección Mendocina y Campeón del Triangular Cuyano de AFA.

Por otra parte, terminó la secundaria en el club en el 2015. Ahora, se dedicará a trabajar por cumplir su sueño: debutar en la primera del club de sus amores.

¿Cómo llegaste a Godoy Cruz?
Mi papá estaba en un asado y justo se encontró al técnico en ese entonces de mi categoría, le contó que estaba jugando la Copa del Diario Uno y le dijo que me lleve a probar en la semana, fui y quedé. Tenía 9 años.

¿Qué pensaste apenas llegaste?
Era chico, sólo quería jugar y divertirme. Obvio que siempre mi sueño fue y es llegar a primera, pero apenas llegué era para hacer amigos y divertirme.

¿Qué es lo mejor que tiene el club desde tu punto de vista?
La verdad que tiene muchas cosas buenas, es un club que mejora y mejora. De lo mejor que tiene el club a modo institución es el predio para entrenar que tiene (Coquimbito). Nada más lindo que entrenar con la comodidad que tenemos ahí. Y que haya entrado en los torneos de AFA también es muy bueno, por la competencia del campeonato. Es otro nivel.

¿Cómo te definís como jugador?
Qué difícil autodefinirse. Creo que lo mejor que tengo es el uno contra uno, la gambeta por así decirlo. Y se podría decir también que tengo buena visión del campo, pero me queda mucho por mejorar y aprender todavía.

¿En qué posición te sentís más cómodo?
Media punta o extremo, cualquiera de las dos me gusta.

¿Cómo es la relación con tus compañeros y cuerpo técnico?
Ahora en el plantel de reserva estoy con muchos chicos que son más grandes y que no he compartido mucho con ellos, pero en lo que va de la pretemporada nos hemos llevado muy bien; por suerte nos ayudan mucho, son muy copados. Y también han subido muchos de mi categoría que con ellos ya llevamos mucho tiempo jugando y tenemos un grupo muy lindo, nos juntamos y todo eso.

Y con los técnicos, muy bien porque los dos ya me han dirigido; Alberto Salomón y sexta de AFA y el Lechuga Alaniz en la Primera de la Liga Mendocina. Saben mucho y tienen mucha onda con el plantel. Y con el Guille, que es el profe, también nos llevamos muy bien, sólo que se hace odiar en la pretemporada, nos está matando (risas).

¿Cuándo te enteraste qué harías la pretemporada con reserva? ¿Cómo lo tomaste?
Estaba en Chile cuando me avisaron. Me puse más que feliz, estaba muy contento y ahí no más fui a sacar el pasaje para volverme porque mi familia se volvía después.

¿Qué sentís cuando vas a entrenar y vas a la par de los que vos veías desde abajo antes?
Me motiva mucho porque son todos muy buenos jugadores. Sé que entrenando con ellos voy a aprender mucho.

¿Cómo son ellos con ustedes? Más en casos como Zuqui, Garro, Angileri, entre otros, que han recorrido el mismo camino.
No entrenamos a la par de primera, pero cuando necesitan jugadores a veces nos llaman y también son muy buena onda, ellos más que nadie saben lo nervioso a veces que te pones antes de un entrenamiento como primera siendo chico.

En general, ¿seguís a algún jugador en especial?
Me gusta mucho Neymar, me encanta cómo juega, es de los que tiran lujos y eso me encanta. Pero mis ídolos, por así decirlo, son Zidane en lo futbolístico y Palermo en su forma de entrenar y sacrificio que hacía.

¿Cuál fue el mejor momento que viviste en Godoy Cruz?
A fin del año pasado se podría decir que debuté en un partido amistoso en primera contra San Martín en el Gambarte. Entré un ratito pero nunca había jugado con tanta gente y encima en el Gambarte. Fue una muy linda experiencia.

¿Y el peor?
Fue todo un año y fue el año que entramos a AFA en el cual había bajado mucho mi rendimiento en la pretemporada, encima me lesioné y todos mis compañeros de toda la vida estaban en AFA y yo estuve en Liga todo el año. La pasé bastante mal hasta que me mentalicé en lo que quería y después a fin de año me terminaron subiendo.

¿En quién o en qué te apoyaste en ese momento?
Mi familia más que todo me apoyó mucho, me decían que no bajara los brazos, que son cosas que pasan; como todo en la vida, son obstáculos que tenés que superar para lograr los objetivos que te proponés. Me sirvió mucho su apoyo, gracias a Dios.

Sos hincha de Godoy Cruz, ¿qué se siente vivir el día a día desde adentro del club y defender los colores que tanto querés?
Sí, voy desde chiquito a la cancha. No hay nada más lindo, siendo hincha también lo vivo de otra manera y es hermoso. Y no hay nada más lindo que saber e imaginarme que en un futuro hay posibilidades de vivir de lo que más me gusta y jugando en el equipo del que soy hincha.

¿Cómo fue lo de las ofertas de jugar en Chile?
A principio del año pasado me ofrecieron por dos lados distintos irme a probar a la U de Chile y a la U Católica. Como era una prueba y era chico no la consideré, debido a que quería quedarme a terminar mis estudios acá y además vengo jugando desde muy chico en Godoy Cruz y lo que más quiero es debutar acá.

¿Una anécdota?
(Risas) En el 2013 estábamos en Chile con mi familia y me tenía que volver a entrenar, como lo hice este año. Me volvía solo desde la Serena; el micro salía de ahí, hacía escala en Mendoza y después seguía hasta San Juan. Pasé la aduana y ahí tenía que avisar a un tío para que me fuera a buscar y me dormí; cuando me desperté ya estaba por llegar a San Juan y ese mismo día tenía que entrenar a las 3. Por suerte apenas llegué a San Juan me mandaron en un micro de vuelta a Mendoza, me hicieron ese favor porque era chico y porque mi mamá le había pedido al chofer que me avisaran en Mendoza. Gracias a Dios llegué a las 2 y pude ir a entrenar, teniendo la suerte ese año de poder quedar en el plantel de AFA. Salió todo bien pero en ese momento me llegué a asustar.

Pasó Nacho Pipistrelli por La Página Bodeguera, una de las grandes promesas de Godoy Cruz que sueña con defender profesionalmente nuestra camiseta.

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