Por la fecha 18 de la Superliga, el Tomba visitó al Granate en el Estadio Néstor Díaz Pérez y regresó a casa una vez más con una derrota entre las manos.
Con el clásico e insistente 4-4-2, Mario Sciacqua se plantó casi con el mismo equipo que enfrentó a River Plate en Mendoza: Rodrigo Rey en el arco, Carrasco, Ferrari, Herrera y Alanis, (este último bajó a la defensa en reemplazo de Ybáñez que salió lesionado en el último encuentro). En el mediocampo nuevamente el doble 5 de Andrada y Henríquez acompañados por Burgoa y Freites en los extremos y por último, Badaloni y el Morro García que volvió luego de cumplir las fechas de suspensión.
Godoy Cruz comenzó siendo regular en el primer tiempo. Buscó apuntar a la tenencia del balón y apostar a un juego ofensivo, más ordenado en las salidas y ganando los metros que necesitaba para acercarse al área de Lanús.
A medida que transcurría el tiempo, el Granate apostó a la debilidad del mediocampo del equipo mendocino que aún no logra subsanar, tocando de memoria el balón entre Esquivel y Moreno que intercambiaban las bandas de juego sin inconvenientes ante la floja actuación de los laterales del Tomba que con poca efectividad no podían acatar las órdenes claras de Mario Sciacqua: juego terrenal, ofensivo y que Henríquez y Andrada tuvieran más comunicación.
En el segundo tiempo se plasmó en la realidad el trabajo que venía haciendo el equipo de Zubeldía, el gol de Moreno que pateó la pelota casi desde el borde del área filtrándose entre los defensores centrales del Tomba que vieron pasar a la redonda sólo con la mirada y Rey, que atinó a atajar pero no llegó con los puños.
Llegado el momento, Sciacqua predispuso los cambios: ingresó Miguel Merentiel por Marcelo Freites en la misma posición apenas medio metro adelantado pero sin relevancia alguna en el juego, Fabián Henríquez que tuvo una pésima actuación por Agustín Manzur que apenas alcanzó a tocar 7 veces el balón y finalmente Valentín Burgoa por Sebastián Lomónaco para dar un poco más de intensidad en la delantera al final del encuentro. Godoy Cruz finalizó el encuentro sin proponer la idea clara que se había propuesto ante River y cada vez con más dudas en el mediocampo. Semana para trabajar.