A veces uno puede pasar por momentos de baches, pero Godoy Cruz siempre se ha levantado. Es así como, después de 14 años volvió a cobrar vida luego de obtener por sexta vez en su historia el campeonato provincial. En un duelo de barrio, el Tomba le ganó a Andes Talleres por 1 a 0 y no es para menos, quién hizo el gol de cabeza es hoy un ídolo del club, el eterno Osvaldo Camargo, goleador del torneo con 21 tantos.
Quienes integraban este enorme batacazo fueron: Eduardo Aníbal Tazare y Héctor Osvaldo Pedone como arqueros, Adolfo Bartolomé Bert, Alberto Castro, Juan Carlos Pereyra, Carlos Ramón Montagnoli, Jorge Santilli, Jorge Núñez, Hugo Manuel León, Alberto Roldan, Osvaldo Camargo, Juan Fernández, Alcides José Schanz, José María Pupatto, Orlando Garro, Alfredo Victorino Torres, Jorge José Pardo, Euclides Norberto Johnston, Juan Santos Argañaraz, Oscar Carbini y Antonio Navarrete. El director técnico fue Pastor Acosta Barreiro hasta la 27° fecha cuando fue reemplazado por Miguel Ángel Converti.
En el 69’ se iluminó la visión de los tombinos, como hace poco pudimos ver como el Gambarte brillaba de nuevo, ese año llegaban también 4 torres de acero y hormigón que iban a permitirle al Bodeguero tener una iluminación única en Sudamérica. La inauguración oficial fue un 19 de marzo en un partido contra Independiente de Avellaneda, esto fue un hito que marcó el comienzo de una nueva era para el club, estaba destinado ser grande.
Así de imparable fue que un 28 de febrero de 1970, Godoy Cruz se enfrentó a la Selección Argentina y salió victorioso por 3 tantos sobre 2. Un orgullo total, el conjunto albiceleste estaba conformado por jugadores de elite de aquel entonces como Cejas, Perfumo, Pastoriza. Y no nos quedamos ahí, dos semanas más tarde en Temuco, el Expreso con su paso arrollador derrotó a la Selección de Chile, en un encuentro donde finalizó 4 a 3. Esto produjo que se quedara con el cuadrangular internacional. Los goles del Tomba fueron anotados por Camargo a los 15´, Gómez a los 25´ y quien se quedó con el doblete fue Orlando Vicente Garro a los 54´ y a los 87´. En este último partido, el “Negro” Camargo, producto de su buen rendimiento, fue contratado por la Universidad de Chile obteniendo tres títulos aquel año.
La heroicidad no paraba de aparecer en estos años, ya que en 1974 gracias a que fue ganador de la primera rueda de la Liga Mendocina, el conjunto azul y blanco logró pasar al Torneo Nacional. Si bien su comienzo no fue bueno, generó un crecimiento agigantado para toda la institución.
Con Gimnasia, Godoy Cruz peleó todo durante la primera mitad de ese año de tal forma que, en la última fecha tuvieron que disputar un partido entre sí en la cancha de Huracán dado que estaban igualados en puntos. El equipo de Vicente Garro, DT en ese entonces, se quedó con la victoria con un tanto marcado por Jorge Pereira y gracias al portero, Chalo Pedone, quién tapó pelotas que le permitían al Expreso viajar con ilusión al torneo más esperado por todos.
Fue así como disputó el certamen en el grupo C durante la segunda mitad del año. Objetivo cumplido. Al Bodeguero no le fue del todo bien, quizás las anécdotas más ilustrativas son las del Loco Julio en el partido contra Chacarita o los incidentes por el arbitraje de Ángel Coerezza.
Es increíble como cuando uno se sumerge en la historia del club entiende por qué estamos en donde estamos. Había corazón, garra y sobre todo un sueño, que poco a poco iba cobrando vida. Si bien hubo momentos de sequía, el Tomba siempre se levantó y creció. Godoy Cruz está destinado al éxito, es un tren que no para de andar y que cada vez va más lejos.