Fecha número 17 del Torneo Binance, Godoy Cruz viajó a Santiago del Estero para cruzarse a un errático Central Córdoba. El local llegaba golpeado y la visita en un momento de resultados favorables con una ambición clara, la victoria era prácticamente obligatoria.
La dupla presentó dos modificaciones respecto a los titulares que derrotaron a Arsenal en Mendoza. Vega (que demostró grandes cualidades en el puñado de minutos que ha disputado) ingresó por Allende y Abrego recuperó su lugar luego del cuadro febril del fin de semana pasado (Castro Ponce le cedió su lugar).
Por su parte el “Ferroviario” debía afrontar este duelo con algunas bajas, la principal era la de González Mettilli quien es la figura del elenco santiagueño. Bajo ese panorama, en una soleada tarde en el norte del país, se debía de disputar el encuentro.
Primer tiempo
Debido a los 11 que ingresaron, se podía intuír la tendencia que tendría el desarrollo del juego. Orsi-Gómez decidieron por poner en cancha a Burgoa y Vega, 2 jugadores de buen pie pero que su principal característica no es el sacrifico ni la marca.
Teniendo en cuenta esto último es que el dominio de la pelota era totalmente necesario. En la primera media hora la posesión fue escasa y el local se puso en ventaja luego de una mala organización en defensa (un “habitué” en Godoy Cruz).
El error táctico fue notorio y los entrenadores no tuvieron mas alternativa que mover el banco de suplentes. Abrego (que venía con trabajo diferenciado) y Burgoa (por lo anteriormente nombrado) dejaron su lugar a los 35´ para que Castro Ponce y Allende ingresen al terreno de juego. Los 2 cambios que la dupla presentó para esta jornada fueron quienes tuvieron que ingresar para solucionar el bajón futbolístico.
Luego de ello poco sucedió. El dueño de casa estaba conforme con lo hecho hasta el momento y el Tomba atravesaba una clara falta de circulación debido a las escasas triangulaciones en mitad de cancha. Mucha pelota alta que no llegó a destino fue lo presentado por el elenco de Mendoza.
Segundo tiempo
Se continuó con la tendencia de las modificaciones. En esta ocasión el reemplazado fue Vega (el otro que formaba parte de ese incoveniente inicial) para que Larrosa acompañe a un solitario Salomón Rodríguez. El esquema mutó del ya conocido 4-2-3-1 (4-5-1) a un 4-4-2.
Se buscó, con estos ingresos, ser más vertical y generar ocasiones para poder complicar a Rigamonti por primera vez en el trámite. A pesar de ello, Central Córdoba mantuvo la superioridad y así lo plasmaba en situaciones de gol.
El sector más débil (como de costumbre) es el defendido por Breitenbruch. Totalmente insólito que ante la lesión de Elías López no se haya optado por buscar un lateral derecho, el surgido en Independiente es un defensor paurérrimo.
No es lo justo caerle toda la responsabilidad al 4 titular, pero es menester mencionar la falta de inteligencia y responsabilidad en su juego. Todos los equipos le han tomado las medidas a Godoy Cruz, sufre defensivamente y la entrada VIP al área mendocina es la franja diestra.
El desempeño no dejó de ser pésimo. Con muy poco el Ferroviario fue ampliamente superior y goleaba al Expreso. Los méritos tombinos para llevarse puntos fueron nulos, otro partido en el que el desempeño fue muy bajo pero en esta ocasión el premio no se hizo presente.
El único nivel alto fue el Ruso Rodríguez que salvó a los suyos de un papelón mayor. El resto, incluyendo al cuerpo técnico, dejaron todo que desear en tarde santiagueña. Final de la goleada en el Estadio Único Madre de Ciudades.
Conclusiones
No se puede ganar siempre de casualidad, el Godoy Cruz post Bullaude ha sido indudablemente malo desde el juego. A Newell´s se le gana porque el equipo rosarino es muy flojo y jugó gran parte de la cita con un hombre de menos, a Belgrano por las salvadas de Espínola y por las ejecuciones desde los 12 pasos y Arsenal por obra y gracia de las injusticias del fútbol.
Como ante Unión y Gimnasia, llegó otro cachetón de realidad. Cada vez que el Tomba se cree más de lo que es termina cayendo de forma contundente (desde el desempeño o desde el resultado). Perder hoy no significa ser el peor, pero tampoco cuando la racha es positiva se es el mejor.
Se viene sosteniendo hace algún tiempo que el rendimiento no es el adecuado, ganar (y más aún a que el factor suerte acompaña) no debe ser nunca argumento para relajarse. Godoy Cruz llegó a esta jornada con una chapa de candidato que no pudo sostener ante un rival flojo.
A veces, como en aquella derrota ante los dirigidos por Gorosito, el “sopapo” para espabilar es necesario. Esperemos que no se precise ningún otro golpe de realismo y que el Tomba pueda aprender de su gran cantidad de falencias.