Menos de una semana después del soporífero empate ante San Lorenzo en el Malvinas Argentinas, llegaba el turno de colisionar ante un siempre difícil Talleres (que no atraviesa su mejor momento en el año). Para ello, la dupla no presentó modificación alguna en el 11 titular (con respecto al partido anterior).

El condimento especial que tenía este encuentro es que, si el Tomba sumaba, podría sellar finalmente su estadía en Primera División de forma matemática. Esto sucedió pero no de la forma esperada.

Primer tiempo

En este fragmento tal vez se vio lo mejor del equipo de Orsi y Gómez, se notó alguna intención de mejorar el desarrollo y de hacer girar un poco la pelota. Este “punto alto” de nivel fue bastante flojo y se notó de gran manera en el terreno de juego.

La superioridad del local se plasmó en el marcador al cuarto de hora. Luego de que, el ya padecido Diego Valoyes, haga una espectacular corrida de más de 50 metros para ganarle a toda la zaga defensiva de Godoy Cruz.

A los pocos minutos, Tomás Badaloni conectó de forma impecable el centro de Ojeda e igualó el asunto. El gol del 9 parecía darle un poco más de ánimo al Expreso, lamentablemente este éxtasis producido por el empate duró muy poco.

Prácticamente nada sucedió casi hasta el final de la primera parte. La T era claramente superior y el club mendocino no conseguía imponer condición alguna. El mal desempeño de la fecha pasada se repetía junto con los intérpretes, la gran diferencia estuvo en las ambiciones que demostró el oponente.

En el tiempo de descuento, un centro al área del Ruso Rodríguez impactó en el brazo de Castro Ponce y así Godoy estampó (desde la vía de los 12 pasos) el 2 a 1 unos segundos antes del pitazo final.

Segundo tiempo

El descanso del entretiempo, no le dio respiro a Godoy Cruz que saltó al complemento con una falta de ímpetu total. Los dirigidos por Gandolfi controlaban absolutamente todos los aspectos del juego mientras que, el visitante, era un espectador de lujo.

Al igual que en jornadas anteriores, las modificaciones tampoco movieron la aguja. Un desconocido Salomón Rodríguez le dejó su lugar a Allende (quien intentó ir hacia el frente sin conseguir resultados), el decaído Abrego le dejó su lugar a Leyes (que más tarde fue reemplazado por Acevedo debido a una lesión), Burgoa por Castro Ponce y Larrosa por Badaloni.

Mientras los cambios sucedían, el esquema del Tomba sufría mutaciones. Del 4-4-2 al 4-2-3-1 (con la salida de Salomón) y después un intento de dibujo raro en el que no había muchas posiciones fijas y menos resultados favorables produjo. Las cartas ya estaban dadas, Talleres solo tuvo que disfrutar del 3 a 1 parcial (debido a que a los 57 minutos aumentó su ventaja) mientras avanzaba el reloj.

El resultado podría haber sido un escándalo, la superioridad de 2 goles quedó corta en relación a los méritos efectuados por el dueño de casa. Godoy Cruz volvió a arrastrarse en una cancha y lo pagó caro.

Conclusiones

En estos momentos podemos afirmar objetivo cumplido, gracias a la derrota de los demás implicados. Hace 7 fechas que el Bodeguero no hace méritos para sostener la enorme ventaja que había conseguido, el desastroso andar de Aldosivi (sumado al tardío despertar de Patronato) provocaron este “relajo” en el club mendocino.

Hace semanas que el equipo no da respuestas en la cancha, el desgaste producido ha sido superador para varios nombres propios y hasta la actitud ha mermado. Urge el final del campeonato para poder darle un lavado de cara a este equipo, muchos jugadores no funcionan (o no están a la altura) y en los partidos malos se resaltan sus falencias.

Con la permanencia en el bolso, la dupla deberá afrontar la preparación para el próximo campeonato. No sé si mencionar la remota posibilidad del acceso a la Copa Sudamericana (esto es difícil mas no imposible), para que ello ocurra deberá suceder un despertar épico de un equipo que mira el reloj del torneo con la esperanza de que finalice pronto.

Lo único positivo de la tarde fue el gol de Badaloni, el artillero mendocino se está reencontrando con su mejor versión luego de una sequía demasiado larga. Motivo de alegrarse es que el 9 esté recuperando su nivel y la confianza. El resto del equipo deja mucho que desear, tal vez se puede rescatar la actitud de Canale y Ojeda pero no mucho más.

Mucho trabajo por hacer para mejorar la situación, se debe llegar a esa comunión entre cuerpo técnico y plantel que había hace unos meses y que tantos buenos resultados cosechó. Mientras tanto, Godoy Cruz es de primera y de primera no se va.