Última cita de local en este 2022. El descendido Patronato sería el rival en la tarde de domingo, el Tomba tenía una gran oportunidad para revertir la mala racha en Mendoza antes de afrontar la jornada final del Torneo Binance. La sequía de victorias de las semanas recientes generaba que el triunfo sea totalmente necesario.

El esquema implementado en el encuentro anterior volvió a decir presente, no lo hizo así el 11 titular que empató ante Argentinos Juniors. Los protagonistas del 5-3-2 o 3-5-2 (dependiendo el punto de vista) fueron: D.Rodríguez; Pintado, Ortíz, Barrios, Canale, Meli; Acevedo, Andrada, Ojeda; Badaloni y S.Rodríguez. Afuera Ferrari, Pereyra, Abrego y Larrosa fue la decisión del binomio técnico que está a cargo de Godoy Cruz. Varias modificaciones para corregir el desempeño del Bodeguero en el pasado 0 a 0.

Primer tiempo

Correcta parte inicial para el dueño de casa. Desde el inicio buscó explotar los carriles para alimentar al doble 9, la prueba más clara de ello fue un remate en el palo de Salomón Rodríguez luego de un gran centro de Pintado. El intenso andar del Tomba se topó con un paredón de frente, el juez de la tarde se encargó de fabricar un penal para la ventaja de la visita.

Luego del tiro desde los 12 pasos, Patronato se dedicó a los agarrones y la fricción (que en muchas ocasiones Dóvalos no sancionó). En Andrada estaba el eje de las casacas borravino, el mediocentro fue lo mejor de los primeros 45 minutos, se encargó de triangular y lo hizo de forma sobresaliente.

Pintado alternó buenas y malas pero cumplió, cuando se supo proyectar fue importante para el carril derecho en el frente de ataque. Meli demostró actitud y personalidad, a veces le faltó algo de precisión pero estuvo firme. El resto no se destacó, alguno que otro desentonaba un poco pero en líneas generales se jugaba mejor a pesar de la floja actuación.

Lamentablemente, nunca se le supo dar verticalidad al poco dominio y Altamirano sufrió prácticamente nada. A pesar de ello, las posibilidades de revertir el mal resultado parcial estaban presentes y dependía del Tomba pisar un poco más el acelerador para empezar a lastimar a su oponente.

Segundo tiempo

Para el complemento, la dupla decidió meter mano en el equipo. Andrada (cuyo cambio no se entiende a no ser que haya sufrido alguna molestia) le cedió su lugar a Vega y Pintado (de correcto primer tiempo) salió para el ingreso de Ramírez. El esquema sufrió una mutación debido a lo sucedido, el 5-3-2 pasó a 4-4-2.

Prácticamente sin jugadores de marca (quitando a los defensores claro está) ya que Ramírez y Vega tienen poco compromiso en el retroceso, el fuerte de Acevedo no es el quite y Ojeda es el fusil de caza para el ataque. Postura ofensiva (desde los nombres) para el segundo tiempo, ello desarmó lo poco que se había construído en el tramo inicial.

Para la media hora de juego había pasado prácticamente nada. Lo mejor del Tomba estuvo en los atrevidos desbordes de Matías Ramírez, el resto fue muy x para un local que no parecía entender que estaba perdiendo el partido. Para darle tal vez algo más de orden y piernas frescas al equipo, Leyes entró por Acevedo y Larrosa por Rodríguez. Los 2 jugadores que salieron están lejos de su mejor nivel y el día de hoy no fue la excepción.

A los pocos minutos se realizó el último cambio. Orsi-Gómez entendieron (un poco tarde) que era matar o morir, debido a ello es que Ortíz le dejó su lugar a Allende. En consecuencia de esta quinta modificación es que el dibujo táctico mutó nuevamente, el 4-4-2 se transformó en 3-4-3. Toda la carne al asador para disputar los últimos minutos de local en el 2022.

Esto le dio empuje a Godoy Cruz. Cuando quedaban 5 minutos, el local fue por todo y tuvo varias situaciones de gol. Disparos lejanos de Ojeda y Ramírez (uno impacto en el palo y los otros fueron contenidos por Altamirano), un cabezazo de Barrios que fue despejado en la línea y alguna que otra situación con menos peligro. El ímpetu tuvo su máximo esplendor en los segundos finales, el Tomba fue con mas coraje que ideas a buscar el empate.

Este impulso lastimosamente no alcanzó, Dóvalos (de paupérrima actuación) marcó el final y Patronato se llevó los 3 puntos. Otro resultado negativo que alarga la mala racha, algunos dirán “digna” presentación de Godoy Cruz que (sin jugar de gran manera) mostró actitud que tuvo hace algunos meses y que brilló por su ausencia en la racha negativa.

Conclusiones

La derrota siempre duele y lo más importante siempre será el resultado, teniendo esto en cuenta es que el equipo tal vez “convenció” desde lo actitudinal. Aunque el empuje no es suficiente, otro pésimo partido que deja en evidencia lo que ha sido el Tomba últimamente, una vorágine de desorden y malas decisiones que dan como resultado la peor racha de Godoy Cruz en la primera división.

La falta de ideas se nota en la cantidad de esquemas que tiene el elenco mendocino durante el desarrollo de los partidos. No es la primera vez que se nombra las modificaciones que sufre el dibujo táctico con el correr de los minutos, se prueba mucho pero no se consiguen soluciones.

Una lástima la (probable) despedida de Martín Ojeda del público bodeguero. Poco más para agregar, lo que sucede son réplicas del mal desempeño que dejan en evidencia la cantidad de falencias tácticas que posee el equipo de la dupla. En estos momentos, se juega por nada y a nada por lo que hay muchísimo por mejorar y el trabajo a realizar es enorme.