Después del golpe que fue la eliminación sufrida en Chile, Godoy Cruz debía reponerse rápido ante el escolta de la Zona B de la Copa de la Liga.
Sorprendentemente, Oldrá se decidió por armar un once totalmente (salvo por Fernández) alternativo. El once que saltó al Malvinas Argentinas fue el siguiente: Ramírez; Guillén, Salvareschi, Butti, Pereyra; Leyes, Poggi, Fernández; Burgoa, Altamira y Rodríguez.
La gente aún no se acomodaba y Estudiantes ya estaba en ventaja. Grosero error de Salvareschi (fórmula que se repitió en el segundo tanto) y primer grito de los dirigidos por Domínguez.
El Tomba pagaba caro (y rápido) la decisión del equipo alternativo. Muchos errores defensivos que pudieron cortar más de lo que significaron.
Para sintetizar el primer tiempo, podríamos afirmar que Godoy Cruz lo regaló. La defensa estuvo totalmente errática, al mediocampo le costó hacer pie y la delantera solo encontraba aire en los pies de Altamira.
Poco de la zaga central y laterales, algo del tridente de volantes (pero insuficiente) y gris desempeño de Burgoa y Rodríguez.
El complemento inició con otra cara (ingresaron Conechny y Arce). Altamira apareció y con un impecable derechazo decretó el descuento. En 2 encuentros, el juvenil ha demostrado estar a la altura y podría ocupar el lugar que utiliza Cejas (que aún no se termina de acomodar).
Más tarde saltaron al verde césped López Muñoz, Barrea y Ulariaga (en ese orden). El “10” no grabitó, Barrea tuvo sus momentos y el número 9 anotó pero fue anulado por mano.
Antes del gol inválido, Herrera dejó pasar una acción muy similar que debería haber sido penal para el local. Raras varas del colegiado.
A pesar del error arbitral, Godoy Cruz lo pierde por méritos propios. La victoria ante Instituto tendría que haber servido de advertencia. Ganar sin muchos méritos no sucede a menudo y menos cuando el rival es superior.
Otra vez un equipo alternativo, 4 partidos de 10 (40%) han sido sin los habituales desde el arranque. Recién inicia el año, que casi en la mitad de los cotejos se haya pateado el tablero es raro.
Así como se lo ovaciona en los aciertos a Oldrá, hay que saber señalar los erorres. Hoy los cometió y se pagaron caro. Sin invicto, sin valla invicta, sin puntos.